El servicio público de pasajeros en la Capital y la provincia Santo Domingo, principalmente del concho, además de anacrónico , es deficiente y muy caro, a pesar de que es subsidiado por los contribuyentes a través del subsidio al gas licuado de petróleo(GLP).
El precio del pasaje en un carro del concho en ruta corta cuesta 12 pesos, equivalente a unos 33 centavos de dólares, la larga 15, 45 por ciento en relación a la moneda fuerte y más de 50 centavos de la divisa norteamericana en guaguasa, considerado excesivamente caro.
Para los que no están enterado, el gobierno beneficia diariamente al chofer de carro del concho con más de 200 pesos por concepto al subsidio del GLP, por lo que debe derogar procedente del erario miles de millones de pesos al año, convirtiéndose al transcurrir el tiempo en especie de barril sin fondo.
Pero lo peor de esa situación es, que cada día esos bien llamados "Dueños del País", acortan las rutas para sacar más dinero de los bolsillos de los indefensos usuarios, sin que las autoridades se empantalonen para poner en "cintura" a esos abusadores y desalmados.
La mayoría de los carros y las guaguas del concho transitan en muy malas condiciones, convertidas en especie de chatarras donde al pasaje no se les ofrece la másmínima seguridad.
Es por ellos que a través de esta columna he insistido en la necesidad de que el Gobierno adquiera una nueva floilla de autobuses para incorporarlas al servicio que ofrece la OMSA, con lo que además de contribuir al ahorro de recursos a los usuarios contribuiría a eficientizar el transporte, principalmente en la Capital, la provincia Santo Domingo y Santiago, donde esa institución opera rutas.
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