Decenas de haitianos indocumentados, incluyendo mujeres con niños dedicados a pedir limosnas debajo de los semáforos de la capital, fueron detenidos por inspectores de la Dirección General de Migración , quienes serían repatriados a su país en las próximas horas.
"La Camiona", como identifican los haitianos los vehículos donde son transportados por las autoridades, fue iniciado este miércoles en la mañana en la avenida Independencia.
Un destartalado autobús, sin aire, con escasos cristales y cundida de polvo y sucio, es el transporte que usan las autoridades de Migración para tratar de controlar la presencia de haitianos ilegales en las calles y campos.
Los inspectores de Migración, con sus uniformes desgastados por el uso y la intemperie, dominan a la perfección el francés, creole e inglés, herramientas indispensables para tratar con los detenidos que no hablan bien el castellano.
A los haitianos sospechosos se les detiene para verificar documentos, luego son subidos aun estén documentados, para verificar si no hay irregularidades, como cédulas de identidad falsificadas y pasaportes sin visado. El proceso, además de arcaico, es tedioso para los haitianos legales.
Los inspectores carecen de computadoras u otro sistema moderno que le permita depurar a los detenidos, despacharlo si están en orden, o llevarlos a la frontera si están en territorio dominicano de manera irregular.
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