Al menos una decena personas han muerto desde que comenzaron las protestas el jueves pasado y varias han resultado heridas. Se han producido además unas 200 detenciones.
Según la televisión iraní, citada por AP, son 12 los fallecidos. “Algunos manifestantes armados han intentado asaltar comisarías de policía y cuarteles militares encontrando fuerte resistencia por parte de las fuerzas de seguridad”, ha indicado la cadena.
Las dos primeras víctimas mortales se registraron en la noche del sábado, en Doroud, al oeste del país. Posteriormente, el vicegobernador de esa provincia aseguró que las fuerzas del orden no habían disparado sobre los manifestantes.
El domingo por la noche murieron otros 10 manifestantes durante las protestas, dos de ellas en la localidad de Izeh -en el suroeste del país- y otras dos en Doroud. Los dos primeros han fallecido por disparos, aunque un diputado local ha indicado que aún se desconoce si las balas procedían de la Policía o de los manifestantes. En cuanto a los muertos en Doroud, se han producido en un incidente vinculado a las manifestaciones, ya que han fallecido cuando su vehículo ha sido arrollado por un camión de bomberos lanzado pendiente abajo por un grupo de manifestaciones.
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