Editorial
Muestra exhortación a la población dominicana, es que conmemore la muerte y resurrección del redentor de la humanidad (Jesucristo), con moderación y reflexión, evitando excesos que pudiesen derivar en tragedias que lleven luto y desolación a la familia dominicana.
En cada uno de los dominicanos y dominicanas que se movilizarán hacia los distintos pueblos, recae la responsabilidad de garantizar , evitando excesos, su retorno sano y salvo al seno de la familia.
Observamos con preocupación como en fechas conmemorativas y de asueto, muchos ciudadanos dan riendas sueldas al instinto, cometiendo acciones temerarias e irreflexivas , atentando con su vida y los demás.
Ese accionar irresponsable tiene por consecuencia pérdidas de vidas, personas lesionadas, daños a las propiedades públicas y privadas, por accidentes en el tránsito, en mayor proporción.
Además de la moderación , se impone que las personas que abandonarán temporalmente sus hogares adopten las medidas preventivas pertinentes para evitar convertirse en víctimas de los pillos que se mantienen al asecho.Como reza el refrán, ¨el precavido vale por dos ¨.
Valoramos el accionar de las autoridades competentes responsables del montaje de los operativos preventivos, en este caso con motivo de la Semana Santa, en el que el Estado compromete recursos considerables en pro de garantizar seguridad a los miles de vacacionistas que se desplazarán a los diversos pueblos de la geografía Nacional.
He de confiar que el operativo ¨Semana Santa-2019 ¨, coordinado e implementado por el Centro Nacional de Operaciones de Emergencias (COE), contribuya a reducir la cantidad de muertes y heridos en accidentes, así como por ahogamientos e intoxicaciones.
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