Este miércoles en la mañana ha vuelto a ser intenso el humo tóxico que mantiene irritados a los capitaleños, en momentos en que están confinados debido a la pandemia de coronavirus. Una mayoría considera que han sido ineficaces los esfuerzos que brigadas de Obras Públicas y otros organismos oficiales realizan para impedir esta situación.
De su lado, el ingeniero Pepín, mediante nota informativa distribuida a los medios de comunicación señala que “la población debe comprender que ni siquiera la lluvia contribuye con la eliminación definitiva del siniestro”.
“Lo peor aquí ya pasó, y el asunto de la humareda buscamos reducirla a su mínima expresión”, dijo Pepín, para señalar que el MOPC está sellando el botadero con una capa de arcilla y caliche de 40 centímetros, pero “hay un momento en que se tiene que dejar que el vertedero respire, debido a que no se puede sellar por completo” porque “si se sella todo, se convierte en un horno y podría incendiarse por distintos puntos”.
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