El cadáver fue encontrado en un caño que conecta con el río Yuna, y tenía las manos atadas con una cinta de tela, similar a la que llevaba otro cadáver encontrado el sábado en ese río Yuna, a su paso por este municipio.
Las autoridades permitieron tomar imágenes de los tatuajes que posee el cuerpo en estado de putrefacción, con el objetivo de que pueda ser identificado por algún pariente o amigo.
Al lugar acudieron miembros de la Dirección Central de Investigaciones Criminales (DICRIM), el magistrado Benedicto A Reynoso, la Policía Científica y el médico legista que procedió con el examen de los restos, cuyo diagnóstico dijo era reservado. Así como decenas de curiosos, a los cuales se les permitió visualizar la escena para ver si podían reconocer esta persona.
En uno de los tatuajes lleva un mensaje que reza: “Dios le pone pruebas a sus mejores guerreros”, otro dice “Wylly”, distintivos con los cuales se pretende reconocer el occiso.
De su lado, el alcalde Cristhian Concepción, aseguró que el municipio Arenoso es un pueblo de paz y de personas tranquilas, en el cual no se han reportado desaparecidos ni han ocurrido hechos lamentables en los últimos días.
El cuerpo fue trasladado al cementerio de esa localidad, donde al igual que el primero fueron sepultados debido a su avanzado estado de descomposición.
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