Asimismo, la entidad , por intermedio de sus principales ejecutivos a Ysócrates Peña Reyes Rafael Fernández Valerio, Amado José Rosa, Pedro Octavio Alba, Gabriel José García y Julio Lavandier, contempla que la nación requiere relanzar los referidos sectores mediante nuevos lineamientos, para trazar políticas y acciones que impulsen su acoplamiento a las exigencias presentes y futuras de nuestra nación y los avances del mundo desarrollado. Además, para darle sustentabilidad cierta y real a los valores éticos y morales.
Al efecto, entiende imprescindible, procurar el desarrollo deportivo y cultural, por medio de la planificación local, regional y nacional de sus acciones, haciendo posible la profundización de la descentralización en la toma de decisiones del Ministerio de Deportes, el Comité Olímpico Dominicano y otras entidades deportivas nacionales, así como, también, en las entidades encargadas de promover y desarrollar las artes y la cultura.
También, estima indispensable, desarrollar la cultura del deporte, de las bellas artes y del acervo cultural, mediante la implementación de una bien articulada vinculación entre las instituciones deportivas, de salud, educativas, culturales: urbanas y rurales, teniendo por soporte órganos regionales que eficazmente coordinen las entidades deportivas y culturales del sector público y privado, para definir y dar seguimiento con eficacia a las políticas y acciones a ser encauzadas y ejecutadas.
Llama a Impulsar la profesionalización de los responsables de la organización del deporte y de la educación física, además, de las diferentes ramas artísticas y culturales, así como de quienes lo practican y cultivan, para acoplar al país con los avances de las naciones desarrolladas, además, para proveernos de columnas que impulsen un mayor grado sustentabilidad de lo sociocultural y lo sociodeportivo.
Como parte de la plataforma a desarrollar, ve vital la puesta en operación de centros regionales de concentración y preparación de atletas de alto rendimiento junto a la optimización y eficientización de sus estructuras físicas y técnicas, además, consolidar sus centros de las bellas artes y de la cultura, así como también, dar paso a centros regionales de la cultura, con el fin de impulsar el desarrollo personal y espiritual de sus habitantes tanto en zonas urbanas como rurales.
En la implementación de dicho cometido, considera de relevante importancia, tomar de palanca y eje del desarrollo nacional, los valiosos recursos culturales-artísticos que detenta República Dominicana en las diferentes regiones que la conforman; además, procurar el desarrollo de los grandes talentos que posee para impulsarlos, protegerlos y desarrollarlos.
Agrega, que también ha llegado el momento de implementar profundos cambios en la práctica de los deportes y del sector artístico-cultural como actividades profesionales, mediante un cambio de mentalidad, para lograr impulsar con eficiencia su solidez y sustentación como columnas del progreso social.
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