“La verdad es que es un tremendo orgullo para nosotros, estamos en presencia de una nueva generación de peloteros, estos jugadores están bien preparados. Nosotros buscamos la manera de capacitarlos y prepararlos dentro y fuera del terreno. Seguimos trabajando duro para que estos muchachos sean embajadores del béisbol, no solamente en nuestro país, sino en otras naciones. Este es el resultado de ese esfuerzo de todos”, expresó Juan Henderson, director de Operaciones de la Academia Mets de Nueva York para América Latina y El Caribe.
Henderson resaltó que la gerencia y administración de los Mets, como equipo de Grandes Ligas, valora en gran manera este tipo de procesos y actividades.
“La plana mayor de los Mets, en Estados Unidos, está muy pendiente, especialmente nuestro presidente Sandy Alderson, quien felicita a esta inspiradora camada de jugadores”, agregó.
De su lado, Yerik Pérez, director de la Oficina de MLB en República Dominicana, manifestó lo importante y fundamental que es para la Major League Béisbol la educación de los atletas, “y es por esto que cuando ingresan a nuestras academias, estos reciben formación dentro y fuera del terreno, no solo para ser bachilleres, sino también otros cursos complementarios como clases de inglés y técnicos”.
Subrayó que esta investidura es muy especial, pues, aunque se han hecho otras graduaciones durante la pandemia, esta es la primera que hacemos de manera presencial en esta nueva normalidad.
Esta es la graduación número 11 Centros APEC de Educación a Distancia (CENAPEC) en esta academia, pero en esta oportunidad se trata de una actividad mixta en conjunto con la Escuela de Altos Estudios Formación con Excelencia, institución venezolana que presenta también como bachilleres a prospectos de ese país, así como de Colombia, México y Panamá. Y UAPA, que también formó parte de la capacitación a estos atletas.
Esta investidura tiene un toque especial, ya que también tres empleados de la academia obtuvieron sus títulos de bachilleres, sumado al hecho de que es la primera graduación del Instituto Cultural Dominico Americano (inglés), donde se capacitó a prospectos, al staff, colaboradores y entrenadores. Un hecho digno de resaltar, ya que estos programas han motivado a los empleados de la academia a ser ejemplos de superación para los futuros peloteros.
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