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Pandilla haitiana exige 500 dólares para liberar agregado agrícola dominicano secuestrado


SANTO DOMINGO,RD.- La pandilla haitiana que secuestró al diplomático dominicano Carlos Guillén Tatis, exigen 500 mil dólares de rescate, confirmó este domingo al periódico El Día una fuente de inteligencia del máximo nivel.

El agregado agrícola y comercial de la embajada de República Dominicana en Haití fue secuestrado el sábado en las afueras de Puerto Príncipe cuando se dirigía hacia su país para pasar con su familia el asueto de fin de semana.

Las autoridades confirmaron que el secuestro fue producido por la pandilla 400 Mawozo, la misma que el año pasado secuestró 17 misioneros estadounidenses por los que pidieron un rescate millonario. Aunque los misioneros fueron liberados nunca se informó si se pagó el rescate, pero tampoco se supo de operativos policiacos-militares para lograr su liberación.

El Gobierno dominicano, a través de su embajada en Puerto Príncipe, reclamó a la cancillería de Haití que las autoridades de ese país dispongan una inmediata investigación para la liberación “sano y salvo” de  Carlos Guillén Tatis.

Hasta el momento las autoridades haitianas ni las dominicanas han informado oficialmente sobre el secuestro, manejando el caso como “desaparecido”.

Guillen Tatis fue secuestrado en el área de Croix-des-Bouquets, mientras se dirigía a la ciudad de Jimaní, procedente de Puerto Príncipe.

El embajador, Faruk Miguel, informó que formulaba la solicitud de investigación cumpliendo instrucciones del gobierno dominicano, impartidas por el canciller Roberto Álvarez.

Faruk Miguel adjuntó a la cancillería haitiana una comunicación entregada a la Dirección Central de la Policía Judicial haitiana, con la denuncia sobre el aparente secuestro, y una captura de pantalla de las últimas llamadas telefónicas realizadas en el teléfono de Guillén Tatis.

Esas comunicaciones fueron remitidas a petición de las autoridades haitianas. El embajador dominicano establece que la solicitud para que el consejero dominicano sea liberado sano y salvo se ampara en los artículos 25 y 26 de la Convención de Viena de 1961.

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