El experto en construcciones de diversas infraestructuras, manifestó a través de su red social X, que la 1ra y 2da etapa inaugura en las zonas de alto peligro del saneamiento del Arroyo de Gurabo, funcionan excelentemente bien.
Al mismo tiempo, Tejada. felicita al Presidente Luis Abinader y al actual director del Instituto Nacional de Agua Potables y Alcantarillados(Inapa), Wellington Arnaud, por lo que considera extraordinaria labor en beneficio del conglomerado humano que habÃa en el entorno de Arroyo Gurabo.
En un segundo mensaje en la misma plataforma, el ex presidente del Codia explicó que los estragos producido en la calle 10 de Gurabo, fue por la gran cantidad de basura tirada lo que provocó que el puente se congestionara.
Destacó asimismo, que estas acciones que se ejecutan multiplican la calidad de vida de los dominicanos.
Indicó el ex titular del Codia, que con la tercera etapa de Arroyo Gurabo concluirán con la obra de mayor impacto social y medioambiental que se ha ejecutado en la historia de la República Dominicana por los componentes medioambiental, social, humano y saneamiento.
Las declaraciones del profesional de la ingenierÃa fueron expuesta a propósito de la información publicada en la edición de este viernes 7 de junio en el periódico ListÃn Diario, en el que se asegura que el desbordamiento del Arroyo Gurabo causó estragos tras los intensos aguaceros registrados en Santiago.
“Yo pensaba que me iba a morir parada”, fue lo que pasó por la cabeza de Grisalà Peña al ver que su casa, ubicada en el sector de Gurabo de esta ciudad de Santiago, estaba totalmente inundada tras el desborde del Arroyo Gurabo; reseña ese diario.
Destaca que la calle 10 de Gurabo, todavÃa guarda el lodo que indica el paso del agua sucia por el trayecto. Mientras que, en los bordes del rÃo y el arroyo, las marcas, los derrumbes de tierra y de arboles delatan el nivel de la crecida.
“Aquà no quedó nada, solo quedamos las personas vivas”, narra Peña con evidente dificultad y lágrimas en sus ojos, tras haber perdido todos sus electrodomésticos, la ropa de los niños y de los adultos de la casa, las camas, todo.
Cuenta que al momento del agua desbordarse, estaba cocinando, y que una vecina le vociferó: “Chiquita, el agua”, pero cuando se asomó ya era demasiado tarde. Logró junto a sus hijos, con la casa a mitad de la creciente, subir al segundo nivel.
El puente de la calle 10 se tapó con toda la basura y los palos que traÃa la creciente desde el nacimiento del rÃo y el arroyo Gurabo, ambos convergen en este punto.En otros lugares de Gurabo, la creciente solo “se comió” la tierra de los bordes del rÃo, entrando a los patios, sin embargo, no penetro las viviendas.
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