SANTO DOMINGO.-El expresidente del Colegio Dominicano de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores (Codia), ingeniero Teodoro Tejada, emplazó a los ministros de Vivienda, Carlos Bonilla y de Medio Ambiente, Armando Paíno Henríquez, explicar al país sobre la tala de árboles en el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte, práctica que ha sido censurada por ambientalista y otros ciudadanos.
El profesional de la ingeniería y gremialista, asimismo, liberó de responsabilidad de lo que califica de ¨Ecocidio ¨, al ministro de Deportes, ingeniero Kelvin Cruz, por no ser sus atribuciones.
La tala indiscriminada de árboles y que ha sido objeto de críticas de ambientalistas y otros expertos en preservación de recursos naturales, es para construcciones de infraestructuras adicionales para Los Juegos Centroamericanos y del Caribe 2026.
¨El ministro de Deportes, Kelvin Cruz, no tiene que ver con las talas de árboles en el Centro Olímpico, eso es atribuciones de los Ministerios de Medio Ambiente y MIVHED, que es responsable de las construcciones de los Juegos Deportivos de Centroamérica y del Caribe 2026 ¨, subrayó el ingeniero Tejada.
El ex titular del Codia enfatizó en la necesidad que los Ministros de Vivienda, ingeniero Carlos Bonilla y el de Medio Ambiente y Recursos Naturales, abogado Armando Paíno Henríquez, les den una una explicación al país sobre esa deforestación, que a su entender, constituye un ecocidio.
Las críticas a la tala de árbol en el Centro Olímpico, una de las principales infraestructuras deportivas del país, ha generado críticas de ambientalistas, deportistas y otros ciudadanos, quienes consideran que se está cometiendo un crimen ecológicos en esa zona.
Los responsables de esa práctica han explicado que la idea de transformar el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte en una instalación modelo para los Juegos Centroamericanos y del Caribe 2026, ha venido acompañada de varias imágenes que ha indignado a muchos, con árboles talados.
La preparación del país como sede del evento ha dejado, al menos hasta ahora, una factura ambiental difícil de ignorar. Lo que debía ser un proceso de renovación deportiva ha encendido las alarmas entre ambientalistas y ciudadanos que cuestionan el costo ecológico de esta transformación.
La Fundación Wiche García Saleta fue la primera en alzar la voz, denunciando que aproximadamente 300 árboles han sido cortados en el recinto, calificando la situación como una agresión directa a uno de los principales pulmones de la capital.
Aunque reconocen que en ciertos casos puede ser necesario intervenir zonas verdes, criticaron la falta de criterios técnicos visibles.
“Nosotros entendemos que, en un área boscosa como es este parque, se tenga que eliminar árboles enfermos y sustituirlos por árboles jóvenes, pero tumbar áreas boscosas completas es un acto dañino al parque y a sus usuarios”, dijo La fundación en un comunicado, en el que también advirtió que la restauración ambiental de estas zonas podría tomar más de dos décadas.
0 Comentarios